Lesiones genitales provocan 16.000 consultas anuales de emergencias.
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Por Andrew M.SeamanNUEVA YORK (Reuters Health) – La bicicleta, los muebles y la ropa son la causa de lesiones genitales que, cada año, obligan a casi 16.000 estadounidenses a realizar una consulta a los departamentos de emergencia de los hospitales.«En perspectiva, la incidencia anual (de esas lesiones) es casi el doble que las lesiones dentales y similar a las quemaduras por causas eléctricas y químicas», resumió el autor principal de un nuevo estudio, doctor Benjamin N. Breyer, profesor asistente de urología de University of California, San Francisco. A pesar de que los programas de TV y los videos de Internet hacen que los golpes en la ingle parezcan algo cómico, en realidad son graves. Breyer explicó que las lesiones genitales pueden producir futuros trastornos físicos, psicológicos y reproductivos. Para realizar el estudio publicado en The Journal of Urology, el equipo de Breyer analizó la información de una base de datos nacional de las consultas de emergencia por lesiones con productos de uso masivo.
Identificó todas las lesiones genitales de hombres y mujeres mayores de 18 registradas entre el 2002 y el 2010. Las lesiones afectaban, entre otras partes, el pene, los testículos, la vejiga, los riñones y los genitales femeninos externos (clítoris y labios). En nueve años, se registraron 142.143 lesiones atendidas en los departamentos de emergencia, es decir, unas 15.794 por año, una cifra que no varía en el tiempo. Los artículos de deporte fueron la causa del 30 por ciento de las consultas de las salas de emergencia y la causa más común de lesiones en todas las edades. Los artículos que más problemas causan son las bicicletas y el equipo necesario para el básquet, el fútbol, el fútbol americano y el baseball. Breyer puso como ejemplo de una de esas lesiones las caídas hacia adelante al andar en bicicleta y los golpes contra la barra central. Una forma de prevenir esa lesión es colocar algún producto acolchado en la barra. Otros accidentes fueron por el uso de ropa, elementos para rasurarse o productos de baño, incluidas las lesiones de los penes al cerrar el cierre del pantalón. «Me sorprendió ver tantas lesiones por el uso de la bicicleta, el rasurado púbico o la higiene personal. Para mí, era totalmente inesperado», dijo Breyer. Las lesiones variaban según la edad y el sexo. Dos tercios de las consultas eran de hombres y los jóvenes de entre 18 y 28 años realizaron el 40 por ciento de las consultas. Los mayores sólo representaron el 8 por ciento de las lesiones, aunque era el grupo etario más propenso a lesionarse durante las actividades cotidianas, como darse una ducha. Eso sugiere, según escriben los autores, que la prevención de las caídas sería la mejor estrategia para prevenir esas lesiones en los adultos mayores. FUENTE: The Journal of Urology, online 9 de noviembre del 2012. |