Información general y diagnóstico

1.- ¿CÓMO SE DEFINE EL CÁNCER DE VEJIGA?

Los tumores de la vejiga se agrupan en varios tipos según su apariencia en el microscopio. Según el tipo de cáncer de vejiga que sufra el paciente se pueden definir las opciones de tratamiento.

El principal tipo de cáncer que afecta a la vejiga es:

  • Carcinoma de células transicionales (también conocido como carcinoma urotelial).

Estos mismos tipos de cáncer también pueden crecer en otros lugares del tracto urinario, tal como el revestimiento de los riñones (que se conoce como tumor urotelial del tracto urinario superior), así como en los uréteres y la uretra. De hecho, los pacientes con cáncer de vejiga pueden ocasionalmente presentar tumores en otras localizaciones de la vía urinaria, por lo que ésta debe ser estudiada cuando el primer tumor se diagnostique.

2.- ¿A QUIÉNES AFECTA LA ENFERMEDAD?

El cáncer de vejiga representa la neoplasia (cáncer) más frecuente del tracto urinario. Es tres veces más frecuente en hombres que en mujeres. La media de edad al diagnóstico ronda los 70 años.

El cáncer de vejiga se diagnostica con una frecuencia de casi el doble en la raza  blanca que en las personas de raza negra. En Europa, la incidencia más alta aparece en Europa Occidental y en las zonas del sur, seguidas por el norte de Europa. La incidencia más baja aparece en los países de Europa Oriental.

En el momento del diagnóstico, el 75% de los tumores vesicales son superficiales o no invasivos de la capa muscular. De ellos, un 40 a 70% recidivan, es decir vuelven a salir a pesar del tratamiento realizado  y un 20% progresan a infiltrantes (invasores de la capa muscular) durante el seguimiento.

3.- ¿POR QUÉ SE PRODUCE?

Un factor de riesgo es aquel que cambia las probabilidades de que padezca una enfermedad como lo es el cáncer. Los distintos tipos de cáncer conllevan diferentes factores de riesgo. Por ejemplo, mientras la exposición a los rayos intensos del sol es un factor de riesgo para el cáncer de piel, fumar es un factor de riesgo para muchos cánceres, incluyendo el cáncer de pulmón y el de vejiga. Sin embargo, los factores de riesgo no lo indican todo. Si se tiene uno, o hasta varios factores de riesgo, no necesariamente significa que se desarrollará la enfermedad.

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Muchas personas con uno o más factores de riesgo nunca padecen o padecerán cáncer de vejiga, mientras que otras que ya tienen la enfermedad puede que no tengan factores de riesgo conocidos. No obstante, es importante conocer los factores de riesgo para poder tomar acciones apropiadas, tales como cambios en el comportamiento de la salud o someterse a una observación estricta para poder detectar un cáncer potencial. Debido a que la vejiga es un reservorio para la eliminación de diversos químicos del cuerpo, éstos representan los factores de riesgo principales para el cáncer de vejiga.

4.- ¿DE QUÉ FORMA SE DIAGNOSTICA?

El cáncer de vejiga puede detectarse en sus etapas iniciales. Su detección temprana mejora las probabilidades de que la enfermedad se pueda tratar con buenos resultados.

Diagnóstico según síntomas de alarma

Sangre en la orina

En la mayoría de los casos, la presencia de sangre en orina (hematuria) es el primer signo de advertencia de cáncer de vejiga. Algunas veces, hay suficiente sangre como para cambiar el color de la orina.

Sangre en la orina
Sangre en la orina

La sangre en la orina no implica necesariamente la presencia de cáncer de vejiga. Con mucha más frecuencia, la sangre en la orina se debe a otras afecciones, tal como infecciones urinarias, cálculos renales o en la vejiga u otras enfermedades renales benignas.

Cambios en la forma de orinar

Orinar con mayor frecuencia de lo normal (polaquiuria) también puede ser un síntoma de cáncer de vejiga. Los síntomas causados por irritación, tal como disuria (ardor al orinar) y urgencia (sensación de tener que orinar, pero no poder hacerlo) pueden también ser síntomas de cáncer de vejiga. Sin embargo, es más probable que estos síntomas sean también causados por una afección benigna, tal como una infección, cálculos en la vejiga, vejiga hiperactiva o una próstata agrandada.

Diagnóstico mediante técnicas endoscópicas

Cistoscopia flexible

Podéis consultar este apartado en la parte de diagnóstico en el siguiente click:

Cistoscopia Flexible

Diagnóstico anatomopatológico (del tejido urotelial)

Citología de orina

Se examina la orina obtenida ya sea por micción o por lavado vesical con un microscopio para detectar células tumorales o cancerosas. El estudio de la citología urinaria constituye junto a la cistoscopia los pilares diagnósticos principales del tumor vesical no músculo invasivo. La mayoría de las citologías suele ser negativa.

Biopsia de la vejiga

Cuando una porción de tejido de un área anormal se extrae para determinar si contiene células cancerosas, a este procedimiento se le llama una biopsia. El tejido que se quita se envía al laboratorio para que un patólogo pueda observarlo utilizando el microscopio.

El patólogo es un médico que se especializa en el diagnóstico de enfermedades a través del examen microscópico de los tejidos.

Biopsia de vejiga
Biopsia de vejiga

A veces las muestras para una biopsia de la vejiga se obtienen con más frecuencia durante la cistoscopia, aunque esto no es lo habitual. Esto permite que el médico sea preciso en términos de qué tejido extirpar. Una biopsia puede mostrar si el cáncer está presente y de qué tipo de cáncer se trata. También puede indicar a qué nivel de profundidad el cáncer ha penetrado hacia la pared de la vejiga, lo cual es muy importante para seleccionar el tratamiento. Normalmente el análisis de tejido urotelial se lleva a cabo tras haber realizado el tratamiento mediante Resección transuretral del tumor de vejiga.

Diagnóstico por imágenes

Ecografía (ultrasonido)

Imagen ecográfica de la vejiga con lesión compatible con cáncer urotelia de vejiga en la base
Imagen ecográfica de la vejiga con lesión compatible con cáncer urotelia de vejiga en la base

Podéis consultar este apartado en la parte de diagnóstico en el siguiente click:

https://www.urologosmalaga.com/diagnostico/ecografia-urologica-renal-vesical-prostatica/

Urografía intravenosa (UIV)

Consiste en una radiografía del sistema urinario, tomada después de inyectar un contraste especial en la vena del paciente. Este contraste es filtrado y eliminado por los riñones, pasando posteriormente a los uréteres y a la vejiga. Esto ofrece un mejor detalle del contorno e informa de la funcionalidad de estos órganos en las radiografías y ayuda a encontrar tumores del tracto urinario. A este procedimiento se le llama urografía intravenosa. Hoy día ha sido sustituido por la urografía por TAC o UroTAC.

Urografía por TAC (UroTAC)

La tomografía Axial computerizada (TAC) es un procedimiento radiológico de diagnóstico que produce imágenes transversales tridimensionales del cuerpo humano.

Como en otras pruebas de imagen, se utiliza un contraste por vía intravenosa. Esto ayuda a delinear mejor las estructuras anatómicas, como los vasos sanguíneos del organismo.

Una tomografía computarizada puede proporcionar información precisa sobre el tamaño, la forma y la posición de un tumor. Además puede ayudar a encontrar ganglios linfáticos aumentados de tamaño que pudieran contener cáncer y a proveer una imagen de calidad de los riñones y la vejiga.

Cáncer de vejiga