Urología: cuidados postoperatorios en las intervenciones más comunes
Hoy quiero empezar una serie de artículos sobre el postoperatorio de las intervenciones más comunes en urología. Para empezar, voy a hablaros de la endoscopia – Resección transuretral (RTU) y la Prostatectomía radical, dos operaciones muy distintas que requieren de unos cuidados diferenciados en el postoperatorio (aunque existen puntos comunes). En caso que de quieras conocer estas intervenciones con más detalle, te invito a visitar la página de tratamientos de mi web personal.
Empecemos:
Endoscopia – Resección transuretral (RTU)
La resección transuretral (RTU) consiste en la extirpación de tejidos enfermos de uretra, próstata o de la vejiga empleando un aparato endoscópico llamado resectoscopio. El ingreso hospitalario no suele superar los cinco días. Al no ser un proceso quirúrgico agresivo (no hay incisión), el dolor durante el postoperatorio es mucho menor y tras la intervención, el paciente es capaz de orinar casi al instante tras la retirada de la sonda. Sin embargo, la próstata necesita tiempo para sanar y hay algunos factores que podemos tener en cuenta para acelerar la recuperación:
- Incluir gran cantidad de líquidos en la dieta, sobre todo agua, evitando el alcohol, bebidas con gas y el café.
- Es recomendable salir a pasear a diario durante un periodo breve, empezando por los 15 minutos e ir aumentado este tiempo conforme avance la recuperación.
- Deben evitarse los esfuerzos y nunca excederse levantando objetos pesados (que superen los dos Kilos) y abstenerse de conducir durante un mínimo de dos semanas.
- Es necesario dejar aparcada la actividad sexual durante la recuperación, al menos durante dos semanas, pero este tiempo puede prolongarse, en función de cómo avance el paciente.
Como puedes deducir de las observaciones expuestas anteriormente, el proceso dura unas pocas semanas tras el alta, en muy raras ocasiones se extiende más allá de los dos meses. La paciencia y constancia son la clave de la recuperación.
Existen dos consecuencias muy comunes de esta operación, por las que no hemos de alarmarnos. Son las siguientes:
- En la orina es posible encontrar fragmentos de tejido o sangrado. Es perfectamente normal, ya que se trata de la cicatrización de una herida.
- Algunos pacientes sufren de incontinencia urinaria o pérdida del control de la orina tras una resección transuretral de próstata. Esta es una de las consecuencias más frecuentes, ya que tras la operación, los músculos que controlan la orina han de recuperar su funcionalidad, algo que harán progresivamente. Es aconsejable practicar los ejercicios Kegel que pueden ayudar a que estos músculos se recuperen de una forma más rápida.
Prostatectomía radical
La finalidad de esta intervención es extirpar completamente toda la glándula prostática para tratar el cáncer de próstata. Los cuidados postoperatorios pueden durar de tres a cuatro semanas después del alta, aunque las molestias y el dolor en el abdomen, escroto y el ano pueden prolongarse hasta tres semanas. Durante este periodo, el paciente llevará un catéter (sonda vesical) para drenar la orina de la vejiga, que puede retirarse en el periodo de una a tres semanas. Siguiendo estos consejos las molestias y complicaciones del postoperatorio pueden reducirse considerablemente, aunque cada caso tiene sus particularidades y es necesario consultar siempre con el médico. Aquí os dejamos las directrices más comunes:
- Sobre la herida: como con cualquier herida, ha de cuidarse el apósito cambiándolo a diario, incluso antes siempre que este se ensucie.
- A la hora del baño: la herida puede lavarse con jabón suave y agua, incluso es posible ducharse sin el apósito siempre que la herida permanezca suturada. Sin embargo, mientras la herida permanezca sin cicatrizar y el paciente lleve la sonda (catéter) no es conveniente sumergirse en una bañera, jacuzzi, piscina o permanecer en el agua por tiempo prolongado.
- Es posible que el escroto esté inflamado hasta tres semanas después de la operación. Es recomendable utilizar ropa interior corta y, mientras el paciente permanezca en la cama, poner una toalla bajo el escroto para que actúe como soporte. Generalmente, se retoma la actividad normal de tres a cuatro semanas tras la cirugía. Al principio es normal cierta debilidad, pero poco a poco se irá recuperando.
- El equipo médico indicará al paciente cómo cuidar, revisar y limpiar la sonda vesical. Además, es posible que sienta espasmos en la vejiga, por lo cual es posible tomar medicación. La orina puede aparecer con un color rojo más oscuro dentro de la bolsa de drenaje, eso es completamente normal.
- Algunas de las molestias comunes tras la retirada del catéter son: ardor al orinar, sangre en la orina, una necesidad imperiosa de ir al baño y escapes (incontinencia). Todos estos factores desaparecen con el tiempo y realizando los llamados ejercicios de Kegel se puede acelerar la recuperación.
- Actividad física: hay que evitar realizar esfuerzos, levantar objetos pesados o periodos largos al volante, parando siempre en intervalos de dos horas. No obstante, se aconseja dar breves paseos, ya que un excesivo tiempo en la cama puede ser contraproducente.
- Respecto a la dieta, es necesaria una mayor ingesta de líquidos (sobre todo agua y nunca café o alcohol) para fomentar la diuresis, tomar frutas, verduras y abstenerse de alimentos que provoquen estreñimiento, para no hacer esfuerzo durante las deposiciones.
- En caso de tomar cualquier medicación, siempre es conveniente exponerlo en la consulta para evitar complicaciones.
- Pueden existir algunos problemas sexuales tras la cirugía, con la erección, el orgasmo o notar una cantidad menor de semen, pero no es nada fuera de lo habitual. Como con la actividad física, el ritmo habitual suele recuperarse paulatinamente.
Con los avances que ha experimentado este tipo de intervenciones de próstata, se han reducido considerablemente las complicaciones postoperatorias. Además, el constante seguimiento del paciente en nuestra clínica hace que se ataje cualquier problema casi de inmediato. Sin embargo, de tener cualquier duda o consulta, puedes ponerte en contacto con nosotros a través del teléfono 952 963 763 o el formulario de contacto. Estaremos encantados de atenderte.